Los presidentes de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y de Chile, Gabriel Boric, encabezaron este jueves la despedida oficial del expresidente uruguayo José “Pepe” Mujica, fallecido el pasado 13 de mayo a los 89 años.
La ceremonia se llevó a cabo en el Palacio Legislativo de Montevideo, donde miles de ciudadanos rindieron homenaje al carismático líder durante dos días de velatorio.
Gabriel Boric fue el primero en llegar al Salón de los Pasos Perdidos, acompañado por el presidente uruguayo Yamandú Orsi y la vicepresidenta Carolina Cosse.
El mandatario chileno saludó a la viuda de Mujica, Lucía Topolansky, y se acercó al féretro cubierto con la bandera uruguaya, donde permaneció en silencio durante casi un minuto.
Posteriormente, compartió un cálido diálogo con Topolansky, mientras los ciudadanos continuaban ingresando al recinto para despedirse de su exmandatario.
Minutos después, Lula da Silva arribó al Palacio Legislativo junto a su esposa, Rosângela da Silva, y una comitiva oficial. El presidente brasileño abrazó a Topolansky y se acercó al féretro para rendir homenaje a su amigo y colega.
En declaraciones previas, Lula había destacado la “grandeza humana” de Mujica, afirmando que su sabiduría trascendió las fronteras de Uruguay y su mandato presidencial.
José Mujica falleció en su modesta finca en la periferia de Montevideo, acompañado por su esposa. Sus restos serán cremados y esparcidos en su chacra, cumpliendo así su deseo de descansar en el lugar que consideraba su hogar.