Como fruto de las diversas reuniones que el gobernador Rafael Moreno Valle ha tenido con el precandidato de Compromiso por México, Enrique Peña Nieto, hay muchos acuerdos que algunas veces penden de un hilo.
El tema toral es que las dos senadurías serán ganadas por la alianza peñista, así como ocho diputaciones locales, las otras ocho serían ganadas por los candidatos de Acción Nacional aunque, por supuesto, todos los futuros legisladores federales obedecerían a un solo mando: el de Moreno Valle.
De acuerdo con lo pactado por Moreno Valle con los priistas, las dos senadurías las ganaría el PRI llevando a Enrique Agüera Ibáñez o a Javier López Zavala en la cabeza de la fórmula, y a Guillermo Aréchiga Santamaría.
También la alianza integrada por los partidos PRI, Verde y Nueva Alianza ganaría ocho distritos de la entidad, los cuales serán: el 2 de Zacatlán, que encabezará José Luis Márquez Martínez (PRI); el 4 de Zacatlán, que encabezará Hugo Alejo (Panal); el 5 de San Martín Texmelucan, que recaerá en Víctor Hugo Islas Hernández; el 7 de Tepeaca, en donde el candidato será Jesús Morales Flores, hermano del exgobernador Melquiades Morales; el 14, con cabecera en Izúcar de Matamoros, en donde el candidato será Filiberto Guevara y el 16, con cabecera en Ajalpan, donde el candidato será el aún líder del SNTE, Cirilo Salas. Y se supone que los dos de Puebla, el 6 y el 11, complementarían el acuerdo.
El PAN tendría manos libres de acuerdo a esto, en los distritos 1 con cabecera en Huauchinango, en donde el candidato es el expriista Carlos Martínez Amador; el 3 con cabecera en Teziutlán, donde el candidato es José Antonio Vázquez; el 8 con cabecera en Ciudad Sedán, en donde el candidato es Inés Saturnino; el 9 donde va su exdirectora del Instituto Poblano de la Mujer, Blanca Jiménez; el 10 con cabecera en Cholula, al cual irá Julio Lorenzini; el 12, donde va su operador Néstor Gordillo; el 13 con cabecera en Atlixco, donde el candidato es Guillermo Velázquez y el 15, donde aún no se sabe quién irá a la contienda. El PAN ganaría la senaduría de la primera minoría, con Javier Lozano Alarcón a la cabeza.
Ese es el panorama color de rosa que han fabricado como buenos aliados políticos el gobernador de Puebla, Peña Nieto y la maestra Elba Esther, pero hace unos días hubo factores que pusieron en riesgo el acuerdo.
Blanca Alcalá, la manzana de la discordia
Cuentan que como si se tratase de una moderna Helena de Troya, la exalcaldesa de Puebla, Blanca Alcalá Ruiz, amenazó con ser el punto de ruptura entre el equipo de Enrique Peña Nieto, específicamente entre su coordinador de campaña, Luis Videgaray y el gobernador de Puebla.
Y es que de acuerdo con diversas fuentes, hace unos días el coordinador de la campaña de Peña Nieto le habría llamado al gobernador Moreno Valle para notificarle que el mexiquense y un grupo importante al interior del PRI veían con buenos ojos que la expresidenta municipal de Puebla se convirtiera en la candidata del PRI al Senado de la República, y por ende, quien encabece a la fórmula cuyo segundo lugar le corresponde a Guillermo Aréchiga Santamaría.
La noticia le cayó como una bomba al inquilino de Casa Puebla, quien de inmediato respondió que si Blanca Alcalá era designada para encabezar la fórmula al Senado, por supuesto que él lo iba a ver como una ruptura de los acuerdos que había establecido con el precandidato priista, y entonces la elección se jugaría de manera libre en el estado.
Incluso, cuentan que aseguró que toda su operación política se dirigiría a hacer perder al PRI, aunque Guillermo Aréchiga quedara fuera del Senado, pese a ser una recomendación directa de la maestra Elba Esther Gordillo. Y es que de ninguna manera el gobernador Moreno Valle quiere que Blanca Alcalá sea la candidata del PRI al Senado de la República.
Muchos dicen que lo hace por un problema personal, cuando en realidad es completamente diferente: el gobernador entiende que Alcalá es un personaje incómodo para su sucesión. Si Blanca gana el Senado se convierte de inmediato en la próxima candidata a la gubernatura y eso complica el tablero del ajedrez morenovallista.
Se ve que Peña Nieto y Videgaray atendieron el mensaje del gobernador de Puebla, porque ayer el periódico Reforma publicó que Blanca Alcalá Ruiz será la nueva secretaria de Gestión Social del CEN del PRI, lo cual la deja como quería Moreno Valle, fuera de la candidatura al Senado.
El pacto Moreno Valle-Peña Nieto

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