Funcionarios del gobierno de Rafael Moreno Valle, particularmente el subsecretario de la Secretaría General de Gobierno, Fernando Morales Martínez, formaron parte del proceso electoral más perverso de los últimos años en la entidad poblana, señaló el presidente del Consejo de Organismos Empresariales, Francisco José Romero Serrano.
No obstante, dijo que las actitudes y acciones de ese funcionario público “dejan mucho que desear y hasta se han dejado ventilar sus voces y acciones de coerción, que obviamente mancharon el proceso electoral”; además, deja entrever que sus intereses personales están por encima de los intereses partidistas y de la sociedad.
El presidente de ese organismo empresarial lamentó que Fernando Morales, como funcionario de la SGG, haya evidenciado sus intereses de partido, que llegó al grado de meter sus actividades dentro del gobierno poblano, en la vida política, acciones que deben ir totalmente separadas.
No obstante, solicitó a las autoridades electorales federales investiguen a fondo la actuación del subsecretario de la SGG, porque invariablemente, dijo, esta llamada telefónica que se llevó a cabo, muestra un hecho coercitivo, además que evidencia que hubo intimidación en contra del diputado del Partido Verde Ecologista, Juan Carlos Natale.
Romero Serrano afirmó que los funcionarios públicos, en pleno uso de sus facultades, deben actuar con tolerancia y sobre todo apegarse estrictamente a derecho y a los procesos democráticos que nos llevan a elegir al gobernante que todos queremos, aseguró.
Lo que debe hacer Fernando Morales, dijo el presidente del COE, es reflexionar en primer lugar su labor como funcionario, pero también como priista declarado y como hijo de un ex priista, porque deja entrever que sus intereses personales se encuentran por encima incluso de su propio partido político.
Moreno Valle disparó deuda
En la recta de la final de la administración gubernamental de Rafael Moreno Valle, la deuda del gobierno estatal de Puebla vía crédito, asociaciones público privadas, proyectos de inversión y bonos cupón cero, ascienden a 16 mil 162.9 millones de pesos, reveló el vicepresidente del Consejo de Organismos Empresariales, César Bonilla Yunes.
Los anteriores, son datos al 31 de marzo del presente año, lo que comparado con el sexenio anterior triplica la deuda contraída por el exgobernador Mario Marín Torres.
Reveló que la deuda directa de largo plazo, con la banca, de parte del gobierno estatal de Puebla oscila en 5 mil 678.3 millones de pesos, mientras que vía asociaciones públicas, privadas y proyectos de inversión suman 9 mil 299.6 millones de pesos, y mil 185 millones de pesos en bonos cupón cero.
En comparación, reveló que en el sexenio del anterior gobernador, Mario Marín Torres, la deuda del Estado de Puebla, pasó de cero a unos 3 mil 350 millones de pesos, ejercidos directamente por el gobierno del Estado de Puebla, además de 2 mil 415 millones de pesos, que correspondieron al SOAPAP.
Bonilla Yunes comentó que el tema de fondo resulta preocupante, porque la deuda contraída por el gobierno estatal será pagada completamente hasta el 2035, lo que significa que se dejan compromisos económicos a los siguientes tres gobiernos estatales, por lo menos.
Reiteró que los semáforos económicos del país, nos marcan en números muy por abajo y en los primeros lugares de la pobreza extrema, tanto en zonas rurales como urbanas, donde se han venido gestando cinturones de miseria.
Por todo lo anterior, dijo el dirigente empresarial, resulta necesario que los ajustes al presupuesto estatal en 2016, le permitan al próximo gobierno, tener el suficiente margen de maniobra para el desarrollo de sus propios proyectos.
Dijo que ante el creciente endeudamiento que prevalece, la propuesta directa del COE, es ser muy cautos con la deuda pública y proyectar que haya maniobra económica para los próximos tres sexenios y no caigamos en una posible insolvencia económica en el próximo gobierno del estado.
No obstante, recordó que algunos programas de gobierno se requiere que haya continuidad, también es importante que se entienda que para garantizar esa continuidad no se dispare la deuda pública, en detrimento del desarrollo de la entidad poblana.
Desde la perspectiva del Consejo de Organismos Empresariales, dijo su vicepresidente, en la actualidad y de manera inmediata, en el estado de Puebla se requiere impulsar la obra social y con ello evitar que se incremente la cantidad de poblanos en extrema pobreza, “hay que atacar esa pobreza en las zonas urbanas y rurales donde se incrementan los cinturones de miseria”.
Por todo lo anterior y de cara al anuncio del gobierno federal de un nuevo ajuste en el presupuesto para el próximo año, el gobierno del Estado de Puebla tiene que evitar caer en la tentación de contratar más deuda, sobre todo cuando la deuda total acumulada se incrementó en términos reales, durante el presente gobierno estatal, concluyó.