En una medida sin precedentes, el gobierno de Donald Trump prohibió a la Universidad de Harvard inscribir a estudiantes extranjeros, decisión que ha encendido alarmas en el ámbito académico y ha sido interpretada como un ataque directo al pensamiento crítico y a la diversidad en la educación superior.

La especialista Rosa María Lechuga, entrevistada por Informe 96 en Cadena IN, contextualizó esta acción como parte de una agenda represiva más amplia. “Hoy, ser mexicano es un peligro. Ser migrante en Estados Unidos también lo es. Pero, al mismo tiempo, es un acto de valentía y resistencia”, declaró. Según Lechuga, el objetivo es moldear la academia para alinearla con una ideología excluyente y autoritaria.

El caso de Harvard no es aislado: otras instituciones como la Universidad de Columbia también han sido afectadas, con reportes de investigadores detenidos en aeropuertos, cancelaciones de visas y confiscación de pertenencias personales. Ante este panorama, Harvard ha activado protocolos de emergencia, incluyendo comunicación directa con los afectados y coordinación con consulados como el de México en Boston.

Para la especialista, estas decisiones no solo afectan a estudiantes y académicos, sino que atacan directamente la identidad migrante de Estados Unidos. “Trump busca destruir la educación superior en su país. No está interesado en mejorar la calidad educativa, sino en eliminar cualquier disidencia”, advirtió.

Lechuga subrayó que la exclusión de estudiantes internacionales es parte de una transformación institucional global, pero con un enfoque especialmente agresivo en Estados Unidos, país cuya riqueza histórica y cultural se ha construido gracias a la migración. “Esta política no solo afecta el estatus migratorio de individuos, sino que atenta contra una dimensión histórica fundamental del país”, concluyó.