El primer trimestre de 2025 dejó en Puebla un escenario mixto en materia de seguridad pública: mientras algunos delitos de alto impacto repuntaron con fuerza, otros mostraron señales de contención.

De acuerdo con el informe del IGAVIM Observatorio Ciudadano, con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), los delitos de homicidio culposo, secuestro, violación, violencia familiar y robo de vehículo registraron aumentos.

En contraste, los feminicidios, robos a casa habitación, a transeúnte y, en menor medida, a negocio, reflejaron una leve tendencia a la baja.

Violencia familiar

La violencia familiar se mantiene como uno de los delitos con mayor incidencia. Se reportó una carpeta de investigación cada 24 minutos.

La capital acumuló 879 denuncias, 43% más que en el mismo periodo de 2024. Amozoc, Cuautlancingo y San Andrés Cholula también reportaron alzas importantes.

Otro delito en ascenso fue el homicidio culposo, con una frecuencia de una carpeta cada 9 horas con 14 minutos. Amozoc, Puebla y Atlixco destacaron por sus cifras.

Feminicidios a la baja

Uno de los delitos que registraron una baja clara fue el feminicidio. De iniciar una carpeta cada 9 días en 2024, ahora la frecuencia se redujo a una cada 11 días con 9 horas.

En números absolutos, solo seis municipios reportaron feminicidios: Xicotepec, Venustiano Carranza, Tlatlauquitepec, Cuautlancingo y Puebla

También el robo a casa habitación presentó una disminución: se pasó de una carpeta cada 2 horas a una cada 2 horas con 36 minutos. Tehuacán, Huauchinango y Cuautlancingo bajaron sus registros.

El robo a transeúnte mostró una baja ligera pero significativa: se pasó de una carpeta cada 4 horas con 58 minutos a una cada 5 horas con 18 minutos. Municipios como Tehuacán y Xicotepec redujeron su incidencia a la mitad.

La extorsión también registró menos casos a nivel estatal. Sin embargo, Puebla capital y San Andrés Cholula fueron la excepción, al duplicar o incluso triplicar sus cifras.

Persisten problemas estructurales

El IGAVIM advierte que más del 93% de los delitos no se denuncian, lo que impide conocer la dimensión real del problema. A eso se suma la falta de profesionalización policial, bajos salarios y una desconfianza ciudadana que sigue en aumento.

“La calidad humana del policía se ha perdido, y con ello, la confianza social”, sentencia el informe.