Diez comerciantes informales fueron retirados del Paseo Bravo durante la celebración de la Virgen de Guadalupe por intentar vender productos que no estaban establecidos en el acuerdo para entregarles espacios en este lugar.
Al respecto, el secretario de Gobernación municipal, Pablo Montiel Solana, explicó que se retiraron a este número de comerciantes informales porque intentaron tomar un número mayor de espacios a los establecidos por la autoridad en las inmediaciones del santuario a la iglesia de Guadalupe, mejor conocida como “La Villita”, ubicada a un costado del Paseo Bravo.
Admitió que muchos “se quisieron pasar de listos”, pues algunos llegaron a vender “piratería”, lo cual no estaba permitido por la autoridad y que se advirtió que no podían hacerlo.
Al ser detectados a tiempo, se desalojaron de las áreas que intentaron ocupar y se les prohibió su regreso a los alrededores de la iglesia que recibió a miles de visitantes, situación que fue acatada por los ambulantes.
El funcionario resaltó que “el saldo fue blanco, gracias a la intervención de la Policía y Tránsito municipal”.
Los comerciantes ambulantes que se establecieron en la zona del Paseo Bravo tuvieron que levantar sus puestos en la madrugada de hoy.