Desde el 15 de febrero de este año, 18 cámaras instaladas en las diversas patrullas del municipio de Puebla dejaron de operar porque la actual administración no ha renovado la póliza correspondiente con la empresa que presta el servicio.

Por lo tanto, se han dejado de monitorear 6 millones 933 mil de lecturas hasta la fecha, entre ellos el registro de autos robados, actos delictivos como el robo a cadenas de autoservicio.

El equipo de monitoreo fue adquirido durante las administraciones de Enrique Doger y Blanca Alcalá con un costo de 800 mil pesos cada una, lo que representó una erogación de 14 millones 400 mil pesos para la ciudad de Puebla, de recursos aportados para el Subsemun.

Sin embargo, el secretario de Seguridad Pública municipal, Amadeo Lara Terrón, no tomó con la seriedad el tema de las cámaras de seguridad y ahora el ayuntamiento incumple con los acuerdos tomados a nivel federal para el combate a la delincuencia.

La situación es grave porque el Sistema Nacional de Seguridad Pública pide reportes de los monitoreos realizados, y en Puebla desde hace más de tres meses no hay informes.