La Unidad de Igualdad de Género debe ser uno de los espacios con mayor inclusión del Congreso del Estado. Desde sus oficinas, la titánica labor de lograr una verdadera igualdad entre mujeres y hombres se debe tejer, a través de estrategias perfectamente cuidadas.
Por desgracia, la frivolidad que algunos legisladores le dieron al recinto legislativo, con sus outfits en TikTok, se ha colado hasta las oficinas.
La responsable de la Unidad de Igualdad de Género, Daniela Mier Bañuelos, ha puesto una caricatura enorme de ella en la puerta de la oficina.
El sticker, muy lejos de los principios de la 4T y la pobreza franciscana, muestra a una rubia con lujosa gargantilla y zapatos fifís. Una Barbie.
Mientras el resto de las oficinas de los diputados se mantienen con un simple número o letrero, pese a que ellos son los titulares de la legislatura, Daniela Mier busca posicionar su imagen con el anuncio.
Las quejas no serían tan marcadas si la Unidad de Igualdad de Género ya nos hubiera regalado algunas recomendaciones, acciones e incluso iniciativas encaminadas a terminar con la brecha que se mantiene entre hombres y mujeres, lo mismo en los trabajos, en las escuelas, en las casas y hasta en el propio recinto.
Ejemplo ha tenido. En la anterior legislatura estuvo al frente una especialista, Rocío García Olmedo, quien fue de las principales impulsoras de la despenalización del aborto. Además, apoyó iniciativas para castigar violencias como la vicaría, la ácida e incluso a deudores alimentarios.
Pero dígame usted, ¿qué campaña o estrategia conoce de esta unidad?, ¿Cuáles han sido las actividades más relevantes de esta área en las últimas semanas?
Además de contar con un enorme sticker en la puerta, ¿para qué nos sirve a las y los poblanos tener a una titular en la Unidad para la Igualdad de Género en el Congreso que prefiere priorizar su imagen sobre las políticas públicas.
