Si como todo apunta, el todavía c se convierte en candidato del PAN al Senado de la República y encabeza la fórmula del albiazul, Acción Nacional corre el riesgo de irse hasta el tercer lugar en 2012.
Si bien es cierto que el aun funcionario federal no se parece en nada al que compitió en 2000 como candidato del PRI a diputado federal por el distrito 11, también lo es que su contacto con Puebla es nulo, a no ser por las constantes visitas que ha realizado durante este año que está por concluir, en donde comenzó a trabajar en la construcción de su candidatura.
Lozano Alarcón es un tipo inteligente, culto, que en su momento fue cobijado por el exgobernador Melquíades Morales Flores, quien lo impulsó como candidato a diputado federal para comenzar a construirle una carrera política en su estado natal.
Tras haber perdido la contienda por la diputación federal, Lozano volvió a ser cobijado por Melquíades y enviado como representante de Puebla en el Distrito Federal. Posteriormente la suerte le sonrió al sumarse muy a tiempo al proyecto político de su excompañero en la escuela Libre de Derecho de la ciudad de México, Felipe Calderón Hinojosa, quien luego de ganar la Presidencia de la República lo nombró secretario del Trabajo y Previsión Social.
El desarraigo de Lozano Alarcón en Puebla no es sólo uno de los puntos débiles del visible candidato del PAN al Senado, también lo es el hecho de que durante cinco años al frente de esta dependencia el empleo que tanto ofertó en campaña Felipe Calderón sólo se quedó en eso, en promesas.
Si a eso se le suma la antipatía que genera la personalidad de quien se perfila a encabezar la fórmula panista, ya que es un hombre culto pero sumamente arrogante, el panorama no le pinta nada bien al aun secretario del Trabajo.
¿Cuáles pueden ser sus fortalezas? Que llega con todo el apoyo del presidente de la República, con todo lo que esto implica, es decir, estructura, recursos y mucha información.
Otra fortaleza es que Lozano también cuenta con el apoyo de Rafael Moreno Valle, el gobernador de Puebla, que incluso sin saber con quién va a jugar, lo cierto es que posiblemente apueste a las dos opciones, al PRI y al PAN, sabedor de que por los dos lados ganará.
Será muy interesante la contienda política entre Manuel Bartlett Díaz, quien encabezará la fórmula del movimiento que encabeza Andrés Manuel López Obrador y Javier Lozano Alarcón, dos pesos completos que se verán las caras el próximo año. A esto habrá de agregar a quien vaya ser la formula priista, la cual bien puede ser Javier López Zavala y Guillermo Aréchiga o Enrique Agüera Ibáñez, llevando como compañero al actual líder del Congreso local.

Maldonado se anota otro éxito
La primera etapa del programa de alfabetización, la cual estuvo a cargo de la SEP, la UAP y la UNAM resultó un verdadero éxito, tan es así que ahora arrancará la segunda etapa en la que se invertirán 64 millones de pesos.
El titular de la SEP, Luis Maldonado Venegas, se anotó otro éxito.
El mérito no sólo se limita al talento del veracruzano, sino también del equipo con el que cuenta, el cual ha sabido trabajar como un grupo compacto y que le ha permitido dar resultados en forma inmediata al gobernador.
Con duras jornadas de trabajo el equipo de Maldonado ha estado a la altura de las exigencias, lo cual los ha colocado a la altura de dependencias como Salud e Infraestructura como las más destacadas del primer año de administración.
Sin duda, el titular de la SEP puede sentirse satisfecho, ha sido un primer año bueno, aunque aquí sí aplica el lema de la administración morenovallista en el sentido de que lo mejor está por venir.