La presidenta Claudia Sheinbaum calificó como "terrible" el hallazgo de crematorios clandestinos en Jalisco, y señaló que el gobernador Pablo Lemus, está en contacto con el secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, y con la Fiscalía General de la República (FGR) para investigar a fondo el caso y determinar si hubo omisiones en las investigaciones anteriores. 

El reciente descubrimiento en Teuchitlán, Jalisco, ha generado una profunda conmoción a nivel nacional y ha puesto en evidencia la brutalidad con la que operan ciertos grupos criminales en el país.

El pasado 5 de marzo, el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco, en colaboración con la Guardia Nacional y el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, localizó tres hornos utilizados para la incineración de cuerpos en el Rancho Izaguirre, ubicado en la comunidad de La Estanzuela, Teuchitlán.

Además de los crematorios, se encontraron cientos de fragmentos óseos, prendas de vestir, maletas y objetos personales pertenecientes a las víctimas. 

Este rancho, de aproximadamente 10,000 metros cuadrados, también funcionaba como centro de adiestramiento del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

En el lugar se hallaron indicios de entrenamientos físicos, como llantas y troncos utilizados para ejercicios, así como casquillos de bala de diversos calibres. 

Entre los objetos encontrados destaca una carta firmada por Eduardo Lerma Nito, un joven de 20 años desaparecido desde febrero de 2024 en Lagos de Moreno, Jalisco.

También se hallaron listas con apodos de personas que podrían haber sido reclutadas forzosamente por el grupo criminal. 

Este predio ya había sido intervenido en septiembre de 2024, cuando la Guardia Nacional detuvo a 10 personas y liberó a dos más tras un enfrentamiento.

Sin embargo, en esa ocasión no se inspeccionó completamente el lugar debido a su extensión, lo que permitió que continuara siendo utilizado para actividades ilícitas.