El gobernador de Puebla, Alejandro Armenta Mier, informó este sábado que su administración ha sostenido ya cuatro reuniones formales con colectivos y familiares de personas desaparecidas en el estado, de las cuales al menos 99 han sido localizadas, aunque muchas en condiciones lamentables.

El reporte oficial indica que son más de 380 los casos documentados, algunos con más de dos décadas de antigüedad.

“Primero eran tres grupos distintos de familiares, pero al ver que estamos atendiendo el tema sin subjetividades, se unieron todos y ahora ya trabajamos juntos”, señaló el mandatario poblano al término de una jornada de actividades comunitarias.

Detalló que los casos acumulados se remontan incluso a hace 20, 25 o hasta 7 años, y sólo cuatro desapariciones corresponden a su actual administración.

“Nosotros no estamos evadiendo responsabilidades. Aunque no ocurrieron en este gobierno, son nuestros ciudadanos y vamos a buscar a todos”, enfatizó.

Reveló que de esos más de 380 casos, se han logrado localizar a 99 personas, gracias al trabajo coordinado entre la Fiscalía General del Estado, el Tribunal Superior de Justicia, la Comisión Estatal de Búsqueda, y la instancia forense IDAMIS.

Sin embargo, reconoció que muchos casos requieren reconstrucciones completas, al no existir carpetas de investigación funcionales o evidencias que permitan líneas claras de indagación.

“El caso más dramático es el de una persona desaparecida hace 21 años. No hay rastros, no hay una sola línea que sirva como punto de partida. Todo debe rehacerse desde cero”, explicó.

El mandatario también se comprometió a mantener un contacto permanente con los colectivos de búsqueda.

“Ahora que ya están unidos, yo estaré con ellos cada mes o mes y medio para dar una evaluación puntual. No estamos contentos, porque esto no es para alegrarse. Estamos tranquilos, porque asumimos el tema con toda la seriedad que merece”, sostuvo.

Armenta subrayó la tragedia que implica para una familia hallar a un ser querido años después en condiciones deplorables-

“Encontrarlo en un trozo de carne o hueso es devastador. Por eso estamos aquí, con todo el respeto y sin minimizar nada”.

Finalmente, hizo un llamado a entender que la búsqueda de personas desaparecidas no puede politizarse ni dividirse.

“Esto no se trata de culpas o tiempos de gobierno. Se trata de seres humanos, y así lo estamos atendiendo”.