El sector gasolinero del país alcanzó un acuerdo con el gobierno federal para mantener el precio del litro de gasolina regular por debajo de los 24 pesos durante al menos seis meses.

Según el documento "Política nacional para promover la estabilización del precio de la gasolina en beneficio del pueblo de México", el pacto fue suscrito por representantes legales de importadores, comercializadores, transportistas, distribuidores y empresarios gasolineros.

El objetivo del acuerdo es garantizar que la población tenga acceso a un precio justo y razonable del combustible, evitando incrementos abruptos que afecten la economía de los ciudadanos.

El pasado 4 de febrero, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo anunció en su conferencia matutina que se buscaba un acuerdo con el gremio gasolinero para impedir que el precio del carburante superara los 24 pesos, luego de que se detectaran estaciones de servicio con precios superiores a esa cifra.

El pacto, que podría firmarse oficialmente este jueves, establece que la Secretaría de Hacienda seguirá aplicando estímulos fiscales a través del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) para suavizar las fluctuaciones en el precio final del combustible, derivadas de variaciones en la cotización internacional del crudo.

El documento también señala que Petróleos Mexicanos (Pemex) ofrecerá un precio mayorista que permita cumplir con el acuerdo. Sin embargo, la implementación efectiva de la medida dependerá de que comercializadores, distribuidores y transportistas ajusten sus políticas de precios para garantizar a los gasolineros un margen de ganancia de 2 pesos por litro.

El pacto, de carácter voluntario, reconoce que, si bien el IEPS ha sido un mecanismo útil para estabilizar los precios de los combustibles en los últimos años, no siempre se ha reflejado directamente en los consumidores cuando los precios del crudo disminuyen o cuando se aplican mayores subsidios al impuesto.

Con este acuerdo, el gobierno y el sector gasolinero buscan contener la inflación y brindar certidumbre a los consumidores, asegurando un precio estable del combustible en el corto plazo.